Ya ha finalizado la primera fase del proyecto de rehabilitación del edificio conocido como el Morabit de Marxuquera, una construcción del siglo XVII de propiedad municipal y declarada como Bien de Interés Cultural. Ha contado con un presupuesto de 121.000 euros (IVA incluido), el 50% proveniente del Ajuntament de Gandia y el 50% restante de las ayudas de los Fondos FEDER, que se otorgan a proyectos para la conservación del patrimonio, a través de la Generalitat Valenciana.
La Alcaldesa de Gandia, Diana Morant, ha asegurado que “desde el Ayuntamiento seguiremos trabajando y apostando por continuar recuperando este edificio. El Morabit era el gran olvidado de Marxuquera y ya le tocaba su momento con esta actuación que supone un antes y un después. Gracias a estas obras hemos rescatado también elementos que se desconocían sobre este monumento, con lo cual nos permite reescribir su historia”.
Con un proyecto de restauración del arquitecto José Manuel Climent, también pasará a ser un edificio visitable después de muchos años cerrado, abandonado y degradándose. Está previsto que pueda abrirse al público a principios del 2021, para hacer visitas guiadas planificadas (a pesar de que dependerá también de la evolución que tenga la pandemia de la Covid-19).
Y es que para Morant, el Morabit también juega un interesante papel de dinamización turística, puesto que el patrimonio es un gran aliado del turismo, más allá del sol y playa, “con esa apuesta fuerte por el turismo cultural y de calidad que está haciendo este gobierno. Los gobernantes tenemos la obligación de relatar nuestra historia. Y, gracias a esta intervención que ya es una realidad, hemos convertido el Morabit de Marxuquera en una referencia patrimonial y turística”.
Desde la concejalía de Patrimonio, la concejala Alicia Izquierdo ha indicado que se está trabajando ya para instalar, próximamente, en una segunda fase, todo lo que se mostrará en el interior del futuro centro de interpretación, con contenidos sobre todo audiovisuales (por no romper la estética del edificio), sobre la Cova de les Meravelles, el Valle de Marxuquera o los trabajos agrícolas tradicionales de esta zona. “El futuro centro de interpretación será una ventana abierta a aspectos tan interesantes como el arte paleolítico de la Cova de les Meravelles y el intenso poblamiento neolítico en las cuevas que bordean este valle, incluso el uso de algunas de ellas como santuarios en época íbero-romana. Hablará de la nieve, de su comercio, del conjunto de las neveras que tiene el valle de Marxuquera y los alrededores. Y, como no, de la vida rural en Marxuquera durante los últimos tres siglos”. Izquierdo ha anunciado también que el entorno del Morabit servirá también para crear “un espacio ambiental donde conocer los árboles y cultivos tradicionales de la zona, y una atalaya privilegiada desde donde poder observar el increíble paisaje que lo rodea. La novedad también es que habrá un acceso directo para poder visitar la Cova de les Meravelles”.